Festivales de cultura, fiestas patronales y mucho más

El año no puede comenzar mejor en el calendario festivo de Logroño, ya que en los fríos primeros días de enero comienza el festival Actual, que lleva celebrándose en la capital riojana desde el año 1991 hasta nuestros días. Nacido como Escenario de Culturas Contemporáneas, se trata de un compendio de lo mejor de la producción cultural internacional, entre cuyos eventos destacan fundamentalmente el cine y la música. Maratones de cine, concursos de cortos y conciertos de primeras figuras en todos los estilos se complementan con actividades paralelas relacionadas con la cultura: exposiciones artísticas, mesas redondas, charlas y exhibiciones de arte callejero. Además de este festival, durante los meses de invierno se suceden las celebraciones tradicionales típicas de todo el país, como los Carnavales y la Semana Santa. El Carnaval se celebra muy especialmente en la localidad de Haro, donde es tradición disfrazarse de forma compleja y espectacular; merece la pena caminar por las calles contemplando los increíbles atuendos mientras se degustan los excelentes vinos entre la animación callejera.

Pero realmente es entre la primavera y el otoño cuando la fiesta tiene en Logroño su máximo exponente. El día 11 de junio dan comienzo unas fiestas con gran arraigo: las fiestas de San Bernabé. Estas jornadas son en realidad un recuerdo y un homenaje a la resistencia del pueblo logroñés frente a la invasión franco-navarra del siglo XVI. Son días de recreación histórica, en los que el pueblo se remonta a cientos de años atrás para ataviarse con trajes de época, degustar especialidades de entonces y realizar recreaciones de los campamentos militares. Transcurrido el verano con las celebraciones patronales de distintos pueblos de alrededor, llega el momento, a comienzos del otoño, de celebrar las famosas fiestas de San Mateo. Estas fiestas tienen lugar en la semana natural del 21 de septiembre y reciben visitantes de toda España e incluso del extranjero. Ya en 1956 recibieron el nombre de Fiestas de la Vendimia, y en ellas se combinan las actividades relacionadas con el vino (cultivo, cosecha y degustación) con las de tipo religioso, como la ofrenda del mosto a la Virgen. Además, no faltan las actividades propias de cualquier festejo popular: corridas de toros, fuegos de artificio, conciertos, verbenas y, sobre todo, mucha animación callejera salpicada de magníficos vinos de Rioja. Las fiestas logroñesas de San Mateo están entre las mejores del Norte de nuestro país.

Excelentes vinos, rutas por bodegas, patrimonio histórico, magnífica naturaleza, mesa y mantel de primera y las fiestas más animadas. ¿Hay quien dé más? Son razones de peso para visitar la ciudad de Logroño y comprobar con nuestros propios ojos que se trata de un lugar al que merece la pena volver. Siempre se nos quedará algo en el tintero...